El término “apreciar” refiere a “valorar”. Para entender la música, es importante conocer los diferentes aspectos que la componen, desde su parte teórica hasta la misma historia, del cómo el compositor hace uso de todos y cada uno de los elementos que ésta le brinda, del cómo el escucha accede e interactua con ella.
Lógicamente toda persona que escucha se convierte en un oyente. Pero hay muchas formas de escuchar, y en esto van a intervenir factores tan importantes como la capacidad de atención y la formación musical de quien escucha.
Muchas personas tienen un gran conocimiento auditivo de numerosas grandes obras de la música, aunque no sepan leer ni interpretar una partitura.
En muchos casos, sus opiniones y sus gustos son excelentes, pero no saben expresarlo con un lenguaje apropiado, lo que les puede producir una sensación de frustración e inseguridad que les impida comunicar sus opiniones ante los músicos. Con frecuencia estas conversaciones se convertirían en una “torre de Babel” sin posibilidad de entendimiento.